¿ESTO TAMBIÉN PASARÁ?

¿SERÁ QUE ESTO TAMBIÉN PASARÁ?

Dra. Bethania Escotto

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¿Alguna vez te ha pasado que estás viviendo un momento tan difícil que quisieras cerrar los ojos y que cuando vuelvas a abrirlos todo haya pasado ya? Y te consuelas repitiendo la famosa frase Esto también pasará?

O por el contrario te emocionas tanto con algo que te hace tan feliz, que sientes como si el tiempo se hubiera detenido, o al menos eso quisieras para que tu felicidad sea eterna y entonces repites la frase pero en forma de pregunta ¿Esto también pasará?

Acá entre tú y yo: quiéralo o no, tanto lo uno como lo otro, lo que deseas como lo que no, pasará. Pero tranquil@, en cualquier caso son buenas noticias, créeme.

Y tú dirás bien, ya sé que todo en esta vida es pasajero ¿para qué necesito profundizar en eso?

Por 4 razones muy sencillas:

1-Para que el afán y la ansiedad no tengan lugar en tu vida. Sabemos que hay cosas que pueden cambiar con nuestro esfuerzo, pero nunca con nuestro afán. O bien, el afán sí las puede cambiar, pero para peor.

Anda esfuérzate, da y haz siempre lo mejor, pero sin afán, con paz en tu corazón.

2-Para que la humildad te guarde, que vivas con los pies sobre la tierra y la mente muy abierta.

3-Para que no te estanques, sino que puedas avanzar en la vida, disfrutando tus bendiciones.

4-Para que seas feliz por decisión, más allá de cualquier circunstancia.

¿Quieres todo eso? ¿sigo?

Entonces veamos qué es lo que hay

Que hacer para lograrlo:

1-Desarrollar un ser espíritu anclado en cada momento presente. ¿Haz leído el libro el poder del ahora, de Eckhar

Tolle? Te lo recomiendo, pero aún más el Eclesiastés. Ya me contarás.

¿Quieres cosas nuevas para tu vida? Ánclate en el presente, ya que este se renueva constantemente. Aprende a deleitarte en la sencillez de las cosas, normalmente ahí es donde está su verdadera esencia.

2-Entender que no todo es acerca de nosotros solamente, que no somos una isla. Muchos de nosotros vivimos en una isla pero no somos una isla, sino parte de un todo que avanza hacia donde tiene que avanzar, con tu permiso o sin él.

4-Desarrollar la confianza en Dios y por tanto en nuestras habilidades para lidiar con cualquier situación. Al hacerlo, esto es lo que vamos a lograr:

Vamos a soltar el miedo a perder. Como dicen qué muchas cosas perdemos por el miedo a perder.

Por el miedo a perder, tanto lo material como los afectos y otras tantas cosas, es que nos apegamos desmedidamente, creyendo que si lo soltamos caeremos al vacío.

¿Sabes qué? Lo único que puede ocurrir es que cese de una vez la lucha angustiosa y seamos sostenidos por los brazos de aquel que todo lo puede y que conoce el panorama completo.

Aprender a entender cuándo es el momento de soltar en manos de dios aquello que tanto nos importa solo nos hará más libres. Después de todo son las mejores manos, las que pueden hacer lo que no podemos hacer.

Al final puede pasar una de estas 2 cosas: Que nuestro anhelo se cumpla en el tiempo o a la manera de Dios que es siempre mejor o que Dios nos muestre un camino mucho más excelente en el cual ni siquiera haga falta lo que creíamos imprescindible.

En ocasiones ocurrirán las dos cosas. Por eso decía el salmista: Delante de ti están todos mis deseos, y mi suspiro no te es oculto.

Ajá ¿y mientras tanto qué hago con mis emociones? Manéjalas con paciencia y confianza, estas también pasarán. 

A cuántos nos ha sucedido que como en la torre de Babel nos hemos aferrado a algo y nos hemos propuesto levantarlo tan alto que llegue hasta el cielo, que sea tan notorio y tan fuerte que no haya modo alguno de derrumbarlo.

Todo hasta que un viento inesperado ha derrumbado todas las piezas de nuestra torre, pero aún con lágrimas en los ojos, terminamos hablando en un lenguaje que ni siquiera conocíamos. Y resultó ser el lenguaje de la aceptación, del avance, de la creatividad y de la novedad de todas las cosas. Sí…

Recuerda que el fin no es hacer muchos libros, como dice el Eclesiastés. Es poner la mirada en el Dios que todo lo puede y ejecutar su voluntad. Porque esto es el todo del hombre. 

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